jueves, 17 de septiembre de 2009

Me dolés, pero tengo enmiendas suficientes como para mantenerme parado. Me ayudás, pero parece casi siempre que todo eso que me brindás es mentira. Me acompañás, pero cuando ves algo interesante, te desviás y desaparecés. Me importás, pero no puedo entenderte y supongo que es normal, porque yo no soy precisamente "sencillo". Te importo, pero te gusta demasiado la comodidad. Te preocupo, pero no hacés nada. Me gusta, pero me cansa. Me querés, pero te aburrís rápido.

Te quiero, pero creo que no voy a aguantar.